noviembre 01, 2009

RETORNO A CASA

Se enteró por los monitores televisivos del tren subterraneo de las muertes en Irak, se deprimió subitamente, somos una sociedad extinguible, agotable, la humanidad se alimenta de si misma, nada bueno nace de nuestro pensar, nada bueno de nuestro sentir, ni de nuestro accionar... Las puertas se abrieron a medio metro de él, entonces escuchó el inconfundible timbre de cierre y mecánicamente caminó dentro del vagón.
En el interior todo uniformemente limpio, iluminado, las miradas de todos perdidas en reflejos, túneles oscuros, en la publicidad adherida al techo, en la noche tras los vidrios y nadie participa de la misma realidad de quien lleva al lado, distintas ropas, distintos olores, distintos cansancios de sus distintas jornadas que se cerraban en aquel viaje de retorno, ¿A nadie le importa la cantidad de muertos? ¿A nadie?...

1 comentario:

XLKSX dijo...

A VECES LAS PERSONAS HACEMOS LA VISTA GORDA A TODO, SERA POR QUE NO LE INTERESA, SERA POR QUE LE DA LO MISMO O PIENSA QUE ESO NO LE AFECTA A SU VIDA. SIEMPRE PIENSO EN LAS MALDITAS DESGRACIAS Y AY VECES QUE NO PODES HACER NADA SOLO AFERRARTE A LA RELIGIÓN Y DECIR Y PREGUNTARTE ¿POR QUE?